martes, 20 de diciembre de 2011

Curiosidades

Se les comenzó a poner herraduras a los caballos en la época del Imperio Romano cuando estos comenzaron a pavimentar sus calles

El verbo "testificar" esta basado en las cortes romanas donde los hombres hacían juramentos por sus testículos sobre alguna declaración.


Los egipcios antiguos dormían en almohadas hechas de piedra


El imperio mas grande de la historia de la humanidad fue el Imperio Británico, durante el siglo XIX.


El código legal más antiguo que se conoce fue puesto en funcionamiento en 1950 antes de Cristo durante el reinado del líder de Babilonia llamado Hammurabi. El Código de Hammurabi es conocido ahora por su énfasis en la ley del desquite: ojo por ojo y diente por diente.


Por un eclipse de luna
En el 413 a. C. Demóstenes y el ejército ateniense se encontraban semicercados en Siracusa (Sicilia). Demóstenes convenció al jefe Nicias de que era mejor levantar el sitio de la ciudad, antes de que siguieran llegando refuerzos al enemigo. Cuando se estaban marchando, hubo un eclipse de luna, siendo considerado de mal agüero por Nicias. De modo que contra toda razón, y para desesperación de Demóstenes, decidió que la marcha debía aplazarse "tres veces nueve días", como prescribían los adivinos. Nicias, Demóstenes, 43.000 atenienses y los adivinos pasaron a mejor vida por ese error táctico.


Exceso de trabajo
En un periodo de diez días, a finales de su reinado (1368-1398), Hung Wu, el primer emperador de la dinastía Ming, tuvo que aprobar 1.660 documentos concernientes a 3.391 asuntos diferentes.

¡Menudo armario!
Cuando murió Isabel I de Rusia, en 1762, en su guardarropas fueron hallados 15.000 vestidos. Acostumbraba a cambiarse de ropa dos, e incluso tres veces por noche.

Enfermedades misteriosas
Una de ellas fue una epidemia declarada en Inglaterra durante el año 1496 y que se conoce en la historia médica como "el sudor inglés", que aunque se inició en Inglaterra, se extendió rápidamente por todo el norte de Europa. Los afectados eran hombres jóvenes, siendo inmunes los niños y los ancianos; aparecían de forma repentina escalofríos nocturnos y accesos febriles, que se acompañaban de dolores de cabeza, palpitaciones, náuseas y ahogos, siendo lo más característico una gran sudoración seguida de una erupción cutánea acompañada de manchas o llagas; en los casos leves los síntomas remitían a las 24 horas, mientras que en los graves se complicaban con delirios, parálisis y somnolencia; en dos semanas el brote desaparecía de la zona afectada. El último brote de esta misteriosa enfermedad se produjo el año 1551, y hasta hoy...

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